Vinos Kaiken llegan a Puerto Ordaz...

El próximo Viernes 25 de Julio llega a Puerto Ordaz los vinos Kaiken de Montes Wine, la presentación estará a cargo de los sommeliers Leo D´Addazio y Dayana Medina en las instalaciones de Leo Licorería Mundial, la cita es a las 5:00 pm, los invitados especiales serán los alumnos sommeliers, las mujeres Amavi y los medios de prensa.

KAIKEN RESERVA MALBEC 2006:
De color rojo peonía, su caída alegre, precisa y explosiva.
Sus aromas a fruta madura como la cereza roja, ciruela pasa combinada con las notas minerales y flores blancas como jazmín, margarita, tiene olores vegetales que recuerda las flores silvestres. Las especias como clavo de olor y regaliz.
En boca su entrada es ruidosa, dulzura al principio poco intensa, notas salinas que se cierra con esa astringencia adecuada, goloso, jovial y amoroso. Es un vino que te atrapa por su encanto.
La armonía, combinación o alianza perfecta unos Tagliolini con una salsa de albóndigas de cordero y cochino con perfume especiado (romero, comino, laurel), y finalmente un toque queso parmesano regiano. Por el equilibrio de este platillo lo complementa este vino por su frescura y acidez. Este es un vino que puede acompañar muchos platillos y momentos con alegría.

KAIKEN RESERVA CABERNET 2006:
La expresión argentina de esta uva de origen francés elaborado por chilenos. A la vista encontramos un color rubí con destellos violáceos, su caída algo imponente, densidad media.
A copa quieta se percibe eucalipto, regaliz, fruta roja madura y un poquito de pimentón verde, descubres fácil sus aromas primarios.
Al agitar se percibe una madera bien integrada con olores a vainilla, chocolate, te ,hay olores florales como las violetas, notas de la concha de mandarina.
En boca es armonioso y fresco, sientes su suavidad que se equilibrio con astringencia originado por fenoles sedosos y aterciopelados.
Su armonía ó combinación un strogonoff de lomito, elaborado con una base de aceite de oliva, cebolla, pepinillo y champiñones con la salsa demiglas y un poco de crema de leche, será limpiado perfectamente. Destaca de este platillos sus aromas que van con el vino, la untuosidad que se limpia con el grado alcohólico del vino y su astringencia

KAIKEN ULTRA CABERNET 2006
De color rojo granate, intenso, sin transparencia, fuerte, apropiado para la seguridad y seriedad que representa. En copa es de densidad media, con piernas densas y delgadas, vestidas con medias pantys.
Sus aromas, concha de naranja, perfumes florales como violeta, acacias, flor de naranja, lima. Frescura de eucalipto, especias como regaliz, canela. Frutas negras, frambuesa, mora, fresa y cerezas. Una madera limpia, nueva, que aporta olores delicados y elegantes.
Aromas terciarios como café, torrefacción, chocolate, hojas de tabaco.
En boca su entrada es elegante y delicada, perfecto equilibrio en la dulzura y luego la acidez, cierra boca una astringencia más marcada y educada. Es persistente y largo en boca, cuando tragas queda tu boca perfumada.
Las armonías con la comida, preferiblemente con carne de cacerías como el pisillo de venado, o el estofado de lapa. Aunque podríamos seguir la sugerencia de Don Aurelio, beberlo solo como vino para meditar, estudiar y pensar, buen compañero…

KAIKEN ULTRA MALBEC 2006:

Su caída en copa es más seria, segura, ya no entra un jovial vino, sino un vino con potencial. Con un vestido de color rubí con destellos granate, de mayor intensidad, denso, de aparente e interesante contenido de gliceroles, descubres unas piernas largas y delgadas que caen lentamente.

Sus aromas a copa quieta son de animales, intensos y seductores. Detrás comienzan los olores florales como los de orange, acacias, las frutales de ciruela pintona dulce y cítrica a la vez, luego la piedra de yesca, de nuevo más fruta confitura de mora, frambuesa, de ciruelas maduras, bayas negras, un cuero limpio y sudores gratos, pimienta rosada, negra y blanca recién molida.
Por encima olor a sotobosque y mucha menta. Es un vino con la personalidad no imponente, sutil y luego explosiva. Su entrada en boca triunfal dulce-acido-salado-amargo un equilibrio perfecto en ese orden confeccionando un vestido aterciopelado, astringencia educada se comporta elegantemente. Se despide discreto haciendo grato de nuevo su bienvenida. Es un vino que conquista serpientes.
Su armonía perfecta con astringencia-alcohol combinaría un estofado de cordero que logre tener suculencia y untuosidad que tenga aromas equilibren los aromas berracos y ansiosos del vino, el cordero aromatizado con romero.

Escrito por Dayana Medina